A.1. Objetivos del control interno

Finalmente, el establecimiento de objetivos específicos se lleva a cabo a partir de objetivos estratégicos, el Titular debe, junto a la Administración, desarrollar objetivos específicos con normas e indicadores de desempeño, que serán comunicados a los responsables para garantizar la rendición de cuentas dentro del control interno.

El buen funcionamiento del control interno depende de la participación activa de las personas servidoras públicas.

A continuación, revisaremos las implicaciones de la persona titular:

Aunque la persona Titular es el máximo responsable del control interno, todas y todos los servidores públicos tienen un papel importante en su implementación y operación. Todo el personal es responsable de garantizar que existan controles suficientes y adecuados para cumplir con sus funciones específicas, lo cual contribuye a alcanzar de manera eficaz y eficiente los objetivos de la institución.

Este modelo de control interno es supervisado por las áreas designadas para tal propósito por el Titular de la organización, y su éxito depende de su capacidad para adaptarse a las circunstancias particulares y mandato legal de la institución, logrando los objetivos operativos, informativos y de cumplimiento, además de proteger los recursos públicos y prevenir actos de corrupción mediante una actuación íntegra del personal.

Con base en la normativa jurídica, cada institución posee un mandato específico del cual se derivan atribuciones y responsabilidades concretas. Asimismo, estas instituciones se alinean con Programas y Planes Nacionales, sectoriales o regionales, además de otros instrumentos obligatorios conforme a las normativas legales vigentes. En el marco de sus competencias y deberes, cada institución establece objetivos de control interno para garantizar, de manera razonable, que sus metas institucionales, plasmadas en un plan estratégico, se alcancen de forma eficaz, eficiente y económica.

La persona Titular, con el respaldo de la Administración y bajo la supervisión del Órgano de Gobierno cuando sea pertinente, tiene la responsabilidad de establecer objetivos de control interno a nivel institucional, así como para cada unidad, función y actividad específica. Cada miembro del personal, dentro de su ámbito de competencia, implementa el control interno con el fin de contribuir al logro de los objetivos institucionales. Aunque el control interno puede representarse de diversas formas, el Marco Integrado de Control Interno, lo conceptualiza como una estructura jerárquica compuesta por cinco componentes, 17 principios, así como 65 elementos de control interno para la evaluación, fundamentales y varios puntos de interés clave.